En la mañana de este sábado se inició la mesa de diálogo entre los presos de la cárcel de Devoto y las autoridades judiciales y penitenciarias, tras el motín de ayer en ese penal. El conflicto se inició cuando se supo que dos guardiacárceles habían dado positivo de coronavirus.

En la tarde del viernes se firmó un acta entre funcionarios y representantes de los reclusos para dar inicio a una ronda de diálogo a las 10 de la mañana de hoy. Entre los reclamos de los reclusos figuran Ley de Cupo; compensaciones de la pena; regularización de la situación de extranjeros con domicilio en el país; informes médicos realizados por médicos forenses; tratamiento de los diferentes métodos alternativos de cumplimiento de la pena, principalmente los grupos de riesgo, y o cercanos al cumplimiento de la condena.

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Ayer, un grupo de al menos 40 presos se amotinó en en el penal y subió a los techos del penal para reclamar el otorgamiento de la prisión domiciliaria, entre otros beneficios, por temor a contagiarse de Covid-19. Juan Martín Mena, secretario de Justicia de la Nación, fue el encargado de llevar adelante las negociaciones.

La situación por el coronavirus abarca no solamente a Devoto, sino también a prácticamente todas las cárceles del Servicio Penitenciario, en cuanto al pedido para descomprimir la cantidad de reclusos, muchos de los cuales son mayores de 60 años y padecen enfermedades como HIV o tuberculosis. De acuerdo a datos oficiales, el penal de Devoto tiene cerca de 1600 plazas y hay 1700 reclusos, aunque se cree que la capacidad puede ser inferior.